martes, 9 de octubre de 2007

Autorretrato

Se escuchaban muchas voces gritar: ¡No te vayas! Me urgía encontrar mi celular, pero no estaba por ningún lado. Y escuchaba nuevamente esas voces gritar: ¡No te vayas! No entendía nada, estaban pasando muchas cosas, pero era incapaz de reaccionar. ¿A dónde iba a ir? Necesitaba mi celular, me urgía hablar. Pi-pi-pi-piiii… ¡no te vayas! Se me hacía corto el tiempo… Pi-pi ¡Fuerza! Era inútil, el celular no aparecía. Estaba cansada. Me empezó a faltar el aire. Algo me impedía respirar. Me desesperé, me dio susto y me acordé que había chocado. Los gritos eran para mí, pero era tarde. Quise hablar, no pude. Moverme, no pude. Estaba cansada. Tan cansada. El celular ya aparecería, después podría hablar. Y las voces nuevamente se escuchaban. Pi-pi-pi-pi, ¡por la cresta! se nos… Algo presionó mi pecho y desperté sola en la sala de un hospital, habían pasado dos horas desde que me habían reanimado.

Siempre supe que había chocado, que me costó respirar, que encontrar el celular era parte de un sueño, pero un mes después me enteré de que mi corazón se había detenido.

¿Estuve muerta y fui la última en saber? ¿Tú sabes cuándo se está muerto?¿Cuando el corazón deja de palpitar o la cabeza ya no funciona?. Ese día una fuerza transparente me venció. Ese día entendí que las barreras físicas sobran, que es mejor arrepentirse por lo hecho que por eso que dejaste de hacer.

Confesiones. Si quiero llorar, lloro. Reir, rio. Bailar, bailo. Dormir, duermo. Jugar, juego. Pararme frente a mil gente a hacer el ridículo, lo hago. El corazón me late. Sí me late. Me late de pena, alegría, emoción y mil sensaciones. Lo puedo sentir. Y si algún día este motor se frena ya sé que no son las personas o el resto de mi cuerpo los responsables, sino esa fuerza indescriptible que está todo el tiempo ahí esperando algún día volver a detenerme.









2 comentarios:

charquican dijo...

Natalia:

Me gusto el recurso con el cual llevaste adelante tu texto, s claro, preciso y fuerte. En cuanto a la foto sería bueno verla con menos flash, pierde intensidad la imagen (trabajar la luz, y ver también como se vería la foto en la misma situación en primer plano o desde otro ángulo)

Lily Peromarta Urzúa

diario de un caminante dijo...

Concuerdo con Lily en que el recurso es original, aunque me molesta el fondo y la mano sujetando el film... tiendo a centrarme en la cara, la expresión, pues el resto me lleva por un camino distinto al de tu texto. Concuerdo además en que la iluminación no es la acertada. Y confío en que puedes mejorarlo.